
La iglesia del pantano de Sau ya rodeada de agua muestra la superación de la sequía
El sistema Ter-Llobregat marca un hito tras la sequía: los embalses superan el 65 % por primera vez desde 2021
Los embalses La Baells, Sau y Susqueda son los principales impulsores de la recuperación hídrica
Así se han transformado los embalses que abastecen Barcelona tras la sequía: el antes y el después, en imágenes
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Los embalses de las cuencas internas de Catalunya han alcanzado este sábado el 65 % de su capacidad total, una cifra que no se registraba desde el 2 de noviembre de 2021.
Concretamente, las reservas de agua se sitúan en 451,67 hectómetros cúbicos, lo que marca un hito después de varios años de intensa sequía.

Antes y después del Pantà de Sau
El sistema Ter-Llobregat, encargado de abastecer a Barcelona y su área metropolitana, ha acumulado ya 401,88 hm³, lo que representa un 65,66 % de su capacidad.
Este dato cobra relevancia teniendo en cuenta que, hace apenas mes y medio, las reservas apenas superaban el 30 %.
La Baells, Sau y Susqueda impulsan la recuperación hídrica
El embalse de La Baells, alimentado por el río Llobregat, se encuentra en situación de pleno técnico y continúa liberando agua.
Por su parte, los embalses de Sau y Susqueda, los dos más grandes de las cuencas internas, acumulan conjuntamente 229 hm³, lo que equivale a más del 57,5 % de su capacidad.
También mejora la situación en otras zonas como la cuenca del Cardener y la del río Muga, donde el embalse de Darnius-Boadella ya roza el 65 % de su capacidad.
Siurana, la única excepción en la recuperación
A pesar de la mejora generalizada, el pantano de Siurana continúa siendo el único embalse por debajo del 50 %, situándose por debajo del 25 %, lo que lo convierte en el punto negro de la sequía que, en gran medida, ya ha quedado atrás en el resto del territorio catalán.
Fin de las restricciones por sequía
La notable mejora de la situación hídrica ha permitido también que se levanten las restricciones por sequía en Barcelona y más de 200 municipios catalanes, lo que marca un punto de inflexión tras meses de emergencia por la falta de agua.