Jornada de viento y lluvia en Barcelona en una imagen de archivo
La AEMET activa la alerta amarilla por fuertes lluvias y tormentas en Barcelona
El organismo público ha emitido un aviso ante los riesgos de inundaciones por las precipitaciones torrenciales, que podrían dejar hasta 50 litros por metro cuadrado
Adiós a la ola de calor en Barcelona: los termómetros se desploman 15 grados y vuelven las lluvias
Noticias relacionadas
El cielo de Barcelona se cubrirá este jueves, 21 de agosto, de nubes amenazantes. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado la alerta amarilla por lluvias y tormentas en toda la provincia, ante la previsión de fenómenos intensos a lo largo del día.
Aunque las precipitaciones no alcanzarán niveles de emergencia, sí podrían estar acompañadas de fuertes tormentas, viento racheado e incluso granizo, lo que ha llevado a extremar la vigilancia.
La alerta afecta no solo a Barcelona, sino también a otras provincias de Catalunya como Girona y Tarragona, y se enmarca en una jornada inestable a nivel nacional, ya que en las Islas Baleares, la situación es más preocupante: Mallorca y Menorca estarán en aviso naranja, por riesgo importante de lluvias de hasta 50 litros por metro cuadrado en una hora.
Transeúntes bajo sus paraguas durante la lluvia en Barcelona
Inestabilidad
Según ha informado la AEMET, la inestabilidad será más pronunciada durante la tarde, cuando la atmósfera se vuelva más propensa a la formación de tormentas. Aunque la previsión indica que la situación tenderá a mejorar de cara al fin de semana, las lluvias persistirán hasta el viernes, especialmente en puntos del litoral y áreas del interior oriental.
Adiós definitivo a la ola de calor
El cambio de tiempo ha traído un respiro tras varias semanas marcadas por temperaturas extremas en buena parte del país.
Las máximas han caído por debajo de los 30 °C, y se espera que en los próximos días se mantengan valores más suaves, con mínimas en torno a los 20 grados.
Aunque estas lluvias no serán suficientes para paliar el déficit hídrico acumulado durante el verano, sí contribuirán a reducir el riesgo de incendios forestales, especialmente en zonas de alta masa forestal, que han estado muy expuestas debido a la sequía.
Este episodio marca, según los modelos meteorológicos, una transición hacia un clima más otoñal, algo habitual en los últimos compases de agosto.
Varias personas pasean por Barcelona con paraguas a causa de las lluvias / EUROPA PRESS
Recomendaciones ante posibles tormentas
Protección Civil ha desaconsejado acercarse a los espacios inundables del litoral barcelonés ante la posibilidad de lluvias extremas y torrenciales y las consecuentes potenciales inundaciones.
Para minimizar riesgos durante los episodios tormentosos, se recomienda a la ciudadania evitar desplazamientos innecesarios durante las horas de mayor intensidad y no estacionar vehículos en zonas inundables.
Asimismo, se insiste en mantenerse informado a través de canales oficiales y no exponerse a zonas abiertas o elevadas en caso de aparato eléctrico.
