La celebración del Mobile World Congress (MWC) tiene un impacto directo en los precios de los hoteles de Barcelona, que cada año cuelgan el cartel de “completo” los días que dura el congreso. Según las consultoras Magma HC y STR, en 2016 el precio medio de los hoteles durante el congreso se situó en 360 euros, cuando la media anual fue de unos 140 euros.

Para este año se esperan cifras similares, aunque el MWC hace muchos esfuerzos para limitar el incremento de los precios. “Los organizadores del Mobile tienen acuerdos con los gremios del sector turístico y pactan unas tarifas máximas según la categoría del hotel”, explica a Metrópoli Abierta uno de los socios de Magma HC, Albert Grau.

En fechas de gran demanda como la del Mobile se produce un aumento de las tarifas, pero sucede lo mismo “en los aviones cuando las plazas son limitadas y la demanda es alta”, por ejemplo. Grau reconoce que hay “hoteles que se aprovechan de la situación, pero son residuales y dan mala imagen de la ciudad”.

ESFUERZO DE LOS HOTELES

Cuando el Ayuntamiento renovó el contrato con GSMA para albergar el Mobile Congress hasta 2023, ya tuvieron en cuenta las necesidades del congreso y se pactaron tarifas, incrementos anuales y habitaciones reservadas para el evento. “Si no existiera este acuerdo, probablemente el MWC no se haría en Barcelona”, señala.

En opinión de Grau, los hoteles hacen un esfuerzo para controlar los precios de las habitaciones porque el congreso les garantiza una ocupación altísima. Fuentes del sector estiman que el Gremi d'Hotels de Barcelona bloquea unas 26.000 habitaciones para el congreso, lo que supone entre un 75% y un 80% de la oferta total de la ciudad. 

Sin estos acuerdos, los precios subirían muchísimo más porque la demanda de alojamientos es enorme para un evento que congrega a más de 100.000 personas en cuatro días. De hecho, la afluencia es tan grande que los asistentes ocupan todos los hoteles de Barcelona y del área metropolitana. 

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