Restos de drogas en los jardines de Sant Pau del Camp, en el Raval

Restos de drogas en los jardines de Sant Pau del Camp, en el Raval Twitter @lafabrepiula

Ciutat vella

Los jardines de Sant Pau del Camp, un 'territorio comanche' dentro del Raval de Barcelona

Los vecinos que sacan a pasear sus perros lidian, día a día, con delincuentes y toxicómanos establecidos en el lugar

20 febrero, 2024 23:30

Indignación, miedo, asco. Son muchas las sensaciones que invaden a los vecinos del Raval de Barcelona cuando hablan de los jardines de Sant Pau del Camp, una espaciosa zona verde ubicada en el barrio del Raval de Barcelona que recurrentemente salta a las cabeceras de sucesos. Tráfico de drogas, agresiones, contrabando, robos, suciedad, incivismo e incluso violaciones conviven con el día a día de los habitantes de esta zona, que ejerce de frontera con el Poble-sec, en un parque al que acuden cientos de personas a pasear a sus perros.

Y es que la zona está incluida en la lista de Zonas de Usos Compartidos (ZUC), por lo que se permite que dueños y perros acudan a pasear sin la necesidad de usar correas. No obstante, han de lidiar con recurrentes golpes relámpago, hechos delictivos o incívicos que suceden en apenas un abrir y cerrar de ojos, para la mayoría de los cuales la policía no llega a tiempo.

Reparto de botín

Según han relatado varios vecinos a Metrópoli y confirma la Asociación de Vecinos del Raval, se trata de un punto de reunión de jóvenes ladrones, que acuden a "repartirse el botín", así como una zona habitual de tráfico y consumo de drogas debido a su cercanía con el CAS Baluard.

De hecho, hace escasos días tuvo lugar una salvaje reyerta entre un grupo de menores que se estaban repartiendo los objetos robados. Lo que comenzó como una discusión, creció hasta una pelea grupal en la que se utilizaron armas blancas de gran tamaño como "cuchillos y puñales". Quienes se encontraban jugando con sus mascotas en el lugar se vieron inmersos en esa pelea, que no dejó un reguero de heridos gracias a la intervención de las fuerzas policiales. "Tuvimos que salir del parque escoltados", lamenta un testigo.

Punto negro

"Este es el punto negro del Raval", algunas fuentes consultadas. La conflictividad del área, por otro lado, contrasta con otras versiones que, si bien coinciden en señalar que ha sido, tradicionalmente, un lugar problemático, ahora consideran que lleva tiempo "siendo más tranquilo".

"Ambas partes tienen razón", explica Anna, vecina que todos los días saca a pasear por el parque a su perro. "Lo que ocurre es que es un área muy amplia que ha mejorado gracias a la llegada de gente que saca a pasear a sus mascotas" y eso implica que, durante las horas de sol, se pueda estar en "relativa tranquilidad". "El problema es que nunca sabes cuando van a venir personas a pincharse, cuando van a aparecer ladrones o cuando van a surgir peleas. Lo que sí que sabes es que en algún momento, con mucha frecuencia, va a ocurrir", asegura.

Un hombre duerme sobre el colchón en el parque de Sant Pau del Camp rodeado de basura / CEDIDA

Un hombre duerme sobre el colchón en el parque de Sant Pau del Camp rodeado de basura / CEDIDA

La situación, no obstante, hace un fundido a negro cuando cae la noche. La "falta de iluminación, de alumbrado" y la ausencia de control hace que sea zona incluso de "acampada de personas toxicómanas", que dejan jeringuillas y otros restos de tóxicos, también de grupos de jóvenes que hacen botellón y de delincuentes. A pesar de que el equipamiento "se cierra cada noche", como indica el Ayuntamiento de Barcelona, "saltan las vallas o escalan los muros", rebaten los vecinos.

Preguntados por este medio, Guardia Urbana y Mossos d'Esquadra aseguran que no se ha detectado un aumento de la criminalidad en el área y que, hoy en día, continúan llevándose a cabo batidas y vigilancia de la zona tanto por agentes uniformados como de paisano. El Ayuntamiento de Barcelona, además, recuerda que ya se ha aprobado la instalación de ocho cámaras en el barrio para este 2024.

Tres comisarías

La situación toma una especial relevancia al tener presente que este punto caliente de la criminalidad de la capital catalana, que algunos no dudan en señalar como "el parque más peligroso de Barcelona", está rodeado de comisarías. A escasos metros de la zona verde, se encuentran una de los Mossos d'Esquadra --en la calle Nou de la Rambla--, otra de la Guardia Urbana --calle de Tàpies-- y unas dependencias administrativas de la Guardia Civil --calle de Sant Pau--.

Los jardines de Sant Pau del Camp

Los jardines de Sant Pau del Camp

Para los vecinos, sin embargo, no hay suficientes patrullas. "Si la zona fuera de callejuelas, podríamos entenderlo, pero los tres edificios están bien conectados con el parque y aun así no pasan", lamenta uno de ellos. El resto de las fuentes vecinales consultadas coinciden en señalar que, en el último año, el número de patrullas que se ven se ha reducido considerablemente.

Sea como fuere, lo cierto es que la alta presencia policial en las inmediaciones no ha evitado que sigan cometiéndose delitos de forma recurrente en un parque que, cuando se cierra por la noche, se abre a la delincuencia.