Estallido vecinal por el ruido de los conciertos del Primavera Sound

La noticia se recibió con miedo y la realidad ha hecho justicia a las expectativas. Cada año, el Primavera Sound llega a Barcelona y, con él miles de barceloneses y turistas disfrutan de la amplia oferta musical que se ofrece durante los días que dura el evento. Existe, por otra parte, una cara oculta, la de los miles de vecinos de la ciudad que son incapaces de conciliar el sueño por culpa del ruido que emana de los recintos de concierto.

Se trata de una realidad que se repite sistemáticamente cada vez que un gran artista llega a la capital catalana. Durante el pasado mayo, por ejemplo, los conciertos de Bruce Springsteen y Coldplay generaron rechazo entre los habitantes de los barrios aledaños al Estadi Olímpic, donde tuvo lugar el show. La situación se repite habitualmente en aquellos que viven cerca del fòrum, pues el ruido de festivvales y conciertos llega a kilómetros de distancia. Ahora, los vecinos de barrios del distrito de Sant Martí y de la ciudad de Sant Adrià de Besòs encaran un fin de semana en el que dormir va a convertirse en misión imposible.

PROTESTAS VECINALES

Y a los comunicados de rechazo, siguieron las manifestaciones. Hace escasos días, medio centenar de asociaciones vecinales se concentraban para exigir que se tomaran medidas contra el ruido. Reclamaciones que, por otra parte, no suelen conseguir su objetivo, pues cada año se repiten. La organización del festival, por su parte, aseguró que habían tomado medidas para mitigar el impacto actústico de los conciertos.

Imagen aérea del festival Primavera Sound de Barcelona / EFE

Por este motivo, hace dos años crearon la Plataforma Stop Concerts al Fòrum, desde donde denuncian como "infernal" el ruido de los días del evento y alegan que su "derecho al descanso" debe estar garantizado. Los residentes también han dejado claro en varias ocasiones su malestar por el incivismo de todas las personas que acuden al festival. Residentes de la parte alta del barrio de El Besòs y el Maresme también explican que la zona cercana al recinto se llena de cientos de personas que perjudican el paso de los vecinos, así como la venta de alcohol en plena luz del día y en medio de la calle.

En un tuit publicado este viernes, la plataforma ha denunciado que es imposible que se estén respetando los límites de decibelios e incluso han pedido ayuda a la Fiscalía General del Estado. En la caja de comentarios hay usuarios que aseguran que el ruido de la música llega hasta Mataró.