El proyecto de reforma de la ronda de Sant Antoni solo gusta a los comunes
El PSC, otros partidos del Ayuntamiento y entidades vecinales critican la remodelación propuesta por Janet Sanz y ven falta de consenso
10 junio, 2022 00:00Noticias relacionadas
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Hace una semana que la teniente de alcaldía de Ecología Urbana y Urbanismo, Janet Sanz, anunció cómo será el proyecto de reforma y pacificación de la ronda de Sant Antoni. Parecía que la propuesta presentada sería la que se ejecutaría. Sanz habló de "la hoja ruta definitiva". Pero a día de hoy las ideas dibujadas por Sanz parece que solo gustan a Barcelona en Comú, aunque ella aseguró que había un "gran consenso". Al proyecto le salen voces críticas por todos lados. Está en contra el PSC, socio de gobierno de Ada Colau, buena parte de las entidades y plataformas vecinales y de comerciantes de la zona, y el resto de grupos municipales.
La remodelación de la arteria, que une la plaza de la Universitat con la calle del Comte d'Urgell, planteada por los comunes comportará una gran pacificación que dejará un único carril bus de bajada, carril bici bidreccional, puntos de carga y descarga, más verde, espacios de juegos, zonas de estancia, una plaza en la confluencia de Floridablanca con Casanova y la puesta al día de la plaza del Pes de la Palla. El tráfico privado quedará vetado, dijo Sanz. La responsable de Urbanismo compareció sin los socialistas, lo que ya era una muestra de la falta de consenso entre los dos partidos.
EL PSC SE DESMARCA
Tras siete días en silencio, el PSC ha valorado este jueves el futuro de la ronda de Sant Antoni. El primer teniente de alcaldía, Jaume Collboni, se ha desmarcado de la iniciativa de Sanz. "No hay una decisión final tomada en el seno del gobierno", ha dicho. "Nosotros lo que hemos defendido y defendemos es que las pacificaciones de las calles de la ciudad tienen que ser flexibles y compatibles con más usos. Entre ellos, y muy especialmente, el transporte público. Y en un ámbito tan comercial como el de Sant Antoni también la circulación de pequeñas mercancías".
"Defendemos que se tiene que producir un consenso vecinal para que haya un consenso político". Y ahora parece que no existe. Para el concejal, el proyecto final de la ronda debe dar cabida a todas las necesidades de los vecinos, el comercio y el transporte público. El área de Urbanismo que encabeza la edil de los comunes ha declinado valorar las palabras de Collboni.
GUERRA ABIERTA
Socialistas y comunes llevan meses en una guerra abierta por la reforma de la ronda. En febrero, el grupo que lidera Collboni apoyó "sin enmiendas" una proposición de JuntsxCat que instaba al gobierno municipal a quitar la losa de hormigón de la ronda y a impulsar la reurbanización. La losa de Sant Antoni albergó alrededor de una década las carpas provisionales del mercado de Sant Antoni mientras se reformaba el edificio histórico. En 2018, los comerciantes volvieron al equipamiento de Comte d'Urgell y, desde entonces, la ronda vive en un estado de provisonalidad y con la plataforma convertida en un nido de incivismo, peleas y trapicheo de drogas que han colmado la paciencia de los residentes.
Con posterioridad, el PSC dijo que se encargaría de la retirada de la losa, a través del Instituto Municipal de Mercados, y defendía reformar la calle con un proyecto de 2018 que fue aprobado, licitado y posteriormente anulado. Plantea un carril por sentido de circulación para buses y taxis, un carril bici bidireccional en el centro, aceras de 8,2 metros por lado, más árboles y un carril de carga y descarga y de servicios junto al Raval.
DIFERENCIAS EN EL PLENO
Como avanzó este medio, la regidora de Comercio y Mercados, Montserrat Ballarín, llegó a enviar un correo al gerente del Instituto Municipal de Mercados en el que le pedía "máxima celeridad" para llevar a cabo el desmontaje de la losa de la ronda de Sant Antoni este 2022. La noticia no gustó al área de Urbanismo, que dirige Sanz, porque la mayor parte de las obras públicas que se ejecutan en Barcelona las hace la empresa Bimsa, que cuenta con capital 100 por 100 municipal.
Las diferencias entre los dos partidos también se han hecho evidentes en un par de ocasiones en el pleno. Mientras los de Collboni defendían la reforma de 2018, la formación de Colau quería una actualización de ese proyecto y una mayor pacificación, como la que ahora ha presentado Sanz, que llegó a tener sobre la mesa una peatonalización total de la calle. En el pleno de abril, el PSC votó, al igual que el resto de partidos, una iniciativa de Ciutadans a favor de la reforma de 2018. Los únicos que no la apoyaron fueron los comunes, que se abstuvieron. La propuesta fue aprobada con el posicionamiento favorable de 31 ediles de los 41 totales. Sin embargo, no se ejecutará porque las iniciativas por los grupos municipales no son de obligado cumplimiento para el gobierno.
DIVISIÓN VECINAL
La división en el seno del gobierno se ha trasladado también entre las entidades vecinales. La Plataforma d'Afectats per la Llosa de Sant Antoni, formada por vecinos y comerciantes que viven la ronda, siempre ha defendido -y lo sigue haciendo- que quiere la reforma del 2018, como el PSC. Pero decidió negociar con Sanz para desencallar la reforma y que no quedara enquistada más tiempo. En el lado opuesto hay otras asociaciones, como Acció Raval y Fem Sant Antoni, que rechazan que la calle reabra al tráfico.
En un comunicado de est jueves, 40 entidades del Raval y Sant Antoni muestran su "decepción" con la decisión tomada por el Ayuntamiento de reabrir la calle al tráfico -el proyecto prevé solo buses de bajada, un carril bici bidireccional, carga y descarga de mercancías y entrada y salida de los aparcamientos-, y exige un espacio pacificado para los peatones. Y aseguran que el proyecto de Sanz no responde a ningún consenso. Estos colectivos han decidido no asistir a las reuniones con el municipio porque dicen que se excluye a parte de las entidades.
Según el consistorio, este jueves había convocado un encuentro con entidades del Raval para hablar de futuro de la ronda y su implicación en los barrios. "Eran temas que se habían situado en el marco de la comisión de seguimiento como el cumplimiento de la carga y descarga, temas de movilidad que les preocupaban del barrio y limpieza". Las fuentes municipales consultadas aseguran que con los vecinos y comerciantes de Sant Antoni ya se ha ido haciendo reuniones sobre estos aspectos que no sólo afectaban a la propia losa y a la ronda.
LA OPOSICIÓN, EN CONTRA
El proyecto de los comunes de la ronda de Sant Antoni también tiene en contra al resto de partidos de la oposición. JuntsxCat, Ciutadans, PP, Valents y la regidora no adscrita Marilén Barceló abogan por la remodelación de 2018, mientras que ERC, que en el pleno ha votado a favor de la reforma de hace cuatro años, defiende ahora quitar la losa y hacer si se puede un proceso participativo para acordar la transformación.
En opinión del nuevo concejal de JuntsxCat, Joan Rodríguez, "la pelea interna del gobierno municipal por el futuro del espacio que ahora ocupa la losa de la ronda de Sant Antoni está parando las obras y enfrentando a los vecinos, generando el escenario ideal para a que continúe la degradación, el incivismo y la inseguridad en el espacio. La situación extrema que se vive en la zona ha obligado al gobierno a desplegar una patrulla fija de la Guardia Urbana".
"El gobierno municipal explicó que a finales de este año la losa estaría fuera. Fue un anuncio a la desesperada, que tenía mucho gesto, al día siguiente del corte de la calle del Comte d'Urgell por parte del vecindario, que estaba muy enfadado y harto de retrasos, promesas y engaños. Ahora sabemos que de nuevo mentían. Desde JuntsxCat hemos reivindicado, junto con la plataforma vecinal y los ejes comerciales, el proyecto original de 2018, que ya tenía consenso vecinal y político. Aquel proyecto lo detuvieron unilateralmente comunes y socialistas, habiéndolo ya presentado y mostrado con renders y fotografías, para impulsar la superilla", añade Rodríguez.
En marzo de 2022, en el pleno del Ayuntamiento, JuntsxCat presentó y transaccionó con el gobierno un ruego en el que se pedía el proyecto de 2018 18 con alguna actualización. "Confiamos en que por una vez cumplan con su palabra, y con lo que votaron", denuncia el concejal independentista.
La previsión es que el próximo noviembre se empiece a retirar la losa de la ronda de Sant Antoni y que esté totalmente eliminada en enero de 2023. Con posterioridad, en abril de 2023, se quiere licitar las obras para que arranquen en junio del próximo año, explicó la teniente de alcaldía de Urbanismo. Las elecciones municipales son en mayo. En función de los resultados que haya no hay que descartar que todavía se vean más cambios en el proyecto de remodelación de la ronda. El tiempo dirá.