Castelldefels tiene una particularidad que comparte con otros municipios de la comarca del Baix Llobregat: está dividido por las vías del tren. Un diseño urbanístico que complica la movilidad entre el núcleo urbano y los barrios de la costa.
"La avenida de la Pineda es una de las pocas arterias de salida de la ciudad, por eso creemos que es indispensable que recupere la doble direccionalidad" explica David Solé a Metrópoli, segundo teniente de alcalde popular del Ayuntamiento de Castelldefels. Una actuación que comporta el desmantelamiento del carril bici actual, instaurado hace cuatro años por el anterior mandato socialista.
PROMESA ELECTORAL DEL PP
Cuando Manu Reyes (PP) recuperó la alcaldía de Castelldefels en las pasadas elecciones, tenía claro qué actuaciones iba a ejecutar en primer lugar. Una de sus promesas electorales más repetidas fue el desmantelamiento del carril bici de la avenida de la Pineda, una actuación que ha levantado mucha polémica entre la oposición --que ha mostrado su desacuerdo con el gobierno municipal-- al que tachan de "partido negacionista del cambio climático".
David Solé, también concejal de seguridad y gobernación, remarca a este medio que la intención del consistorio no es suprimir el carril bici, sino devolver el doble sentido de circulación a la avenida de la Pineda, una de las arterias principales de Castelldefels. La bicicleta, por tanto, pasará a compartir espacio con el vehículo privado en una calle donde los coches no podrán circular a más de 20 kilómetros por hora.
"La ciudad solo cuenta con dos arterias principales de unión entre los barrios de la playa y el centro o las autopistas: la avenida de la Pineda y la de Ciutat de Málaga. Esta última sufre constantes inundaciones, suponiendo un peligro para los vecinos, con lo que solo nos quedaba una opción", asegura Solé.
PACIFICAR EL TRÁFICO
Desde el equipo de gobierno esperan que a través de esta actuación se pacifique el tráfico en el centro de la ciudad. El proyecto --con un coste inicial de 251.000 euros-- plantea tres objetivos diferentes, siendo el principal devolver a la calle los dos carriles de circulación con los que contaba antes de su transformación en una vía ciclable en 2019, uno para cada sentido de la marcha. Actualmente, solo se puede circular desde la playa hasta el núcleo urbano.
Además, se instalará una rotonda en la avenida de la Pineda con la calle Molinot para mejorar la movilidad hacia la calle Barcelona o la avenida Ciutat de Málaga, y así acceder de manera más fluida a la C-31 y C-32. Una actuación con un coste de 125.000 euros, IVA incluido.
ERRORES URBANÍSTICOS
El Ayuntamiento de Castelldefels apunta que el anterior gobierno socialista cometió "varios errores urbanísticos" tras la instalación del carril bici. El primero, elevar los pasos de peatones, provocando inundaciones en las fincas vecinas cada vez que llueve con intensidad. Para corregirlo, se rebajarán de nuevo. El segundo, no tener en cuenta el pozo de agua situado en el cruce con Molinot. "La vía ciclable modificó el diseño de los carriles y ahora los coches pasan por encima del pozo, que se está derrumbando", destaca Solé, que recalca que a través de las obras también se solucionará esta problemática.
El consistorio licitará la primera fase del proyecto, que engloba tres actuaciones: generar una rotonda, rebajar los pasos de peatones y subsanar el pozo --todo ello por 166.128 euros--. Además de devolver la bidireccionalidad a la calle para que también se pueda circular desde el centro a la playa, por 33.500 euros.
La segunda fase de las obras, por ahora sin intenciones de ejecutarla, trataría de mejorar el estado de las aceras de la calle, por un precio de 85.000 euros. "Esta fase no será necesaria si con la primera solucionamos todos los problemas de movilidad actuales", asegura Solé.
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
No es la primera vez que Manu Reyes deshace una vía ciclable. En 2011 --durante su primer año como alcalde de Castelldefels-- destinó 25.000 euros en desmantelar el carril bici del paseo Marítimo, una decisión que levantó mucha controversia. Con esta otra sentencia, los partidos de la oposición --PSC, Movem en Comú Podem, ERC y Junts-- sitúan el municipio en una lista negra: "nos provoca vergüenza y rechazo", denuncian.
El gobierno municipal hace oídos sordos a estas críticas, destacando que 12 años después de haber retirado el carril bici del paseo Marítimo, "nadie lo ha vuelto a instalar, un hecho que demuestra su poca efectividad". También remarcan a este medio el apoyo de los vecinos de Castelldefels, que celebran que la avenida de la Pineda recupere su estado original.