Las recientes declaraciones recogidas por este diario de la alcaldesa de Sant Adrià de Besòs, en un artículo sobre la falta de respuesta de la Generalitat y la baja participación ciudadana en las audiencias públicas, merecen una profunda reflexión. En política, la responsabilidad no se puede delegar ni evitar, y mucho menos trasladar a la ciudadanía.
40 años de gobierno no pueden ignorarse. El PSC ha gobernado Sant Adrià de Besòs, durante más de cuatro décadas de forma continua. La actual alcaldesa lleva 16 años en el gobierno municipal y cuatro como máxima responsable.
No se puede desvincular de la gestión de su propio partido ni del estado actual de la ciudad. Le guste o no, su responsabilidad es indiscutible.
La participación ciudadana no es un favor, es un derecho. Culpar a los vecinos de no asistir a las audiencias públicas es un error grave. La participación ciudadana no es espontánea, sino que debe ser promovida, facilitada y fomentada desde el gobierno municipal.
Si la ciudadanía no participa, la pregunta que debería hacerse la alcaldesa es: ¿por qué no lo hacen? ¿Se sienten escuchados? ¿Se han generado los espacios adecuados? En lugar de reproches, es momento de buscar soluciones.
La Generalitat republicana ha sido la que más presencia ha tenido en nuestra ciudad, más que nunca antes en democracia.
En este sentido, resulta sorprendente la afirmación de que la Conselleria de Interior no ha respondido a las demandas del Ayuntamiento, hasta ahora, justo que el PSC ostenta dicho cargo en la persona de Núria Parlón.
El anterior conseller, Joan Ignasi Elena, mantenía reuniones trimestrales con la alcaldesa y tenía contacto directo con los vecinos de La Mina siempre que han querido, algo de lo que ahora no pueden presumir los socialistas.
Además, el presidente Pere Aragonès ha sido el presidente que más veces ha visitado Sant Adrià, en misión oficial, más veces que ningún otro presidente en la historia reciente, comprometiendo inversiones que no tienen precedentes.
Los grandes proyectos del hoy y del mañana en Sant Adrià de Besòs llevan la firma republicana. El proyecto de desarrollo de las Tres Chimeneas, el Hub del audiovisual y el videojuego, la demolición del edificio de Venus o el proyecto "La Mina del futur", que comporta 8 actuaciones: entre ellas, el traslado de una parte del Departament d’Afers Socials, la creación de una nueva escuela 0-3 o las viviendas para el realojo de Venus.
Son algunos de los proyectos que le han caído del cielo a la nueva administración liderada por Salvador Illa. Así como la finalización del memorial del Camp de la Bota o el desarrollo del campus universitario.
La situación de Sant Adrià requiere menos excusas y más soluciones. La ciudadanía no necesita confrontaciones entre administraciones, sino coordinación, transparencia y un equipo de personas que asuman su responsabilidad con valentía y compromiso.