Taoyaca explica bondades magowayasashii
Fermentados, miso, sake o platos 100% japoneses que no se encuentran en otros sitios
15 diciembre, 2018 19:48Noticias relacionadas
Taoyaca es un vocablo japonés semi en desuso que significa bonito o flexible. Buen principio. Abrió en julio en la multicultural calle Verdi de la mano de una ex presentadora de televisión del país nipón. Miwa Tahako lleva tres años en Barcelona, donde llegó para seguir su aventura restauradora pues, además de presentadora, llevaba años en Japón relacionada con la restauración “aunque desde un punto de vista empresarial”. Ahora ha bajado a los fogones y lidera con un español suficiente un pequeño y bonito espacio que habla de origen.
Ambientado con un kimono enorme o telas pensadamente diseminadas procedentes también de kimonos y/o trajes regionales que crean espacios, Taoyaca trabaja bajo la filosofía “Magowayasashii”, acrónimo formado usando las primeras sílabas de las palabras en japonés legumbre, sésamo, algas, verdura, pescado, shiitake y patata. “Utilizamos muchos de estos ingredientes -comenta Tahako-, incorporándolos equilibradamente para conseguir la receta perfecta entre sabor y nutrición".
Esa manera de hacer japonesa –no paras de asombrarte ante ella- llega a su esplendor con el menú degustación. Por 34 euros, impregna filosofía con mochis de patata y queso, sopa de miso, niguiris de salmón flameado, pez mantequilla con salsa de sake o inari sushi, esos saquitos de tofu frito rellenos de arroz sazonado "que no se pueden encontrar en otros restaurantes japoneses y que quien los pide, repite".
Además, la carta comprende llamativas y bonitas especialidades como las propias con alga negra o verde, saquitos de setas y cerdo al vapor, empanadillas de cerdo, yakisoba, tempura de verduras y camarón, pollo frito, sashimi, o sushis, hosomakis o futomakis variados. A mediodía, además, ofrecen opciones de menú combinados entre 9,80 y 22 euros, con boles de arroz con pescado crudo, sopa de miso o rollitos maki sushi. Taoyaca cuenta con carta de vinos por copa y botella (eminentemente catalanes), también evidentemente con sakes en formato chupito (2,50), jarra (8,50) o botella (32 euros).
Aún con ello, Taoyaca no es solo gastronomía, sino que el equipo de Tahako intenta transmitir Japón a cada paso. Por ejemplo, a la hora de beber sake. Se sirve en taza y se recomienda por género. “Los hombres, por el legado samurái, deben beberlo solo con una mano -levantándolo incluso amenazante, agrega un servidor-; las mujeres, con dos y desde abajo”. Cultura y legado. No ir más allá.
Discutamos con propiedad y un plato de Nasu Dengaku (berenjena al miso) o de pez mantequilla sobre la mesa, dos de las variedades verdaderamente niponas que no se encuentran fácilmente en otros locales. Después brindaremos. Con una, dos o 16 manos. Con respeto, siempre. Gran país.