Congresista con reloj de lujo, un blanco perfecto para los ladrones
Los Mossos detienen a 27 hombres que robaban cronógrafos a turistas que acudían a la ciudad por congresos o acontecimientos
12 junio, 2017 13:42Noticias relacionadas
Una visita puntual sin final feliz. Son muchos los turistas que vienen a la ciudad a recorrer y a descubrir Barcelona mapa en mano, pero muchos otros lo hacen para acudir un congreso o a un acontecimiento puntual. Personas con elevado poder adquisitivo que reservan en restaurantes y hoteles de lujo en el Eixample y Ciutat Vella y que son portadores de relojes de alta gama. Es el perfil de las víctimas de unos ladrones especializados que actúan por toda Europa de forma itinerante en ciudades como Barcelona. Los mimos que ahora están en el punto de mira de los Mossos d’Esquadra.
El grupo de multirreincidencia del cuerpo de seguridad ha presentado los primeros datos de un operativo, bautizado como Caso Raqib, en el que han resultado detenidas 27 personas, 14 de ellas en prisión, que en total acumulan más de 250 antecedentes policiales. El inspector jefe de área de investigación criminal de Barcelona, Pere Guillén ha explicado en rueda de prensa que todos ellos trabajaban de forma anárquica y que los objetivos son en su mayoría hombres, “turistas de poder adquisitivo, personas que están en Barcelona por congresos o acontecimientos” que difícilmente vuelven a la ciudad a testificar en el caso.
LADRONES CON PODER ADQUISITIVO
Por su parte, los ladrones detenidos son hombres jóvenes que comparten con sus víctimas el elevado poder adquisitivo del que disfrutaban fruto de los hurtos. De nacionalidad francesa o belga y residentes en ciudades como París o Londres, se encargaban de seleccionar y vigilar a las víctimas para hacerse con el preciado botín con un simple movimiento de muñeca. Si era necesario, hacían uso de la violencia o la intimidación, aunque como ha especificado Guillén, tan solo usaban "la fuerza mínima indispensable" y a veces portaban armas para coaccionar a las víctimas.
Especializados en el robo de estas piezas de joya masculina por toda Europa, suelen actuar unos días en cada ciudad para después buscar un nuevo destino, por ello, Guillén ha destacado la cooperación internacional para poder poner nombre y apellidos a los ladrones de relojes de lujo. "Es una problemática global de la Unión Europea y lo que nos ha funcionado mucho ha sido la colaboración”, puntualizaba este lunes. Pero no eran ellos los que sacaban más dinero con el negocio.
El grup de Multireincidents de BCN fa 27 detinguts x robar rellotges de luxe. Se'ls atribueix 20 robatoris i un botí total de 312.000€ pic.twitter.com/NBk4N4GtiM
— Mossos (@mossos) 12 de junio de 2017
RECEPTADORES, LOS MÁS BENEFICIADOS
Los receptadores, personas que se encargan de colocar los relojes en el mercado negro, son los que se llevan la mayor parte del pastel con una penalidad muy baja, de un máximo de dos años de prisión. Una figura que a juicio del inspector jefe debe ser revisada en el código penal. “A nivel legal se tiene que incidir en el papel del receptor. Si hay gente que roba joyas es porque hay un receptador”, ha señalado el Mosso.
La elección de los turistas de elevado nivel de vida no es casual. Primero por el botín a golpe de muñeca de marcas como Rolex (uno de ellos, falso), Audemars Piguet, Patek Philippe, Hublot, Hermès o Cartier. Segundo por la vulnerabilidad y tercero, porque se aseguran en la mayoría de casos que no vayan a volver para testificar en un juicio. Por ello, ante estos casos los Mossos trabajan a destajo para detectar al ladrón antes de que el turistas abandone el país.
PROCESOS DE RECONOCIMIENTO EXPRÉS
A las víctimas se les pide el número de serie del reloj así como el tiempo que les resta en la ciudad y los lugares en los que se podría contactar con en los próximos días. Si hay suerte, y gracias a la información facilitada por otros países como ha podido ser Francia, se hacen las ruedas de reconocimiento antes de que el damnificado vuelva a coger el avión.
En otras ocasiones, el turistas ha decidido volver a Barcelona para estar presente en el proceso y reconocer al ladrón evitando así que la investigación se quede en nada. Además, las detenciones in fraganti por parte de los Mossos son una garantía de procesos judiciales más ágiles ya que son los propios agentes los que testifican.Todo por tal de resolver el caso antes de que el reloj llegue al mercado negro en países de Oriente Medio y del norte del Magreb, como ha sucedido en estos casos.