Plaza Sant Jaume de Barcelona con el Ayuntamiento
Ciutat Vella reducirá los actos en espacios emblemáticos como Sant Jaume, la Catedral y Lluís Companys para combatir la saturación
El distrito limitará a 25 los eventos anuales en el paseo de Lluís Companys y priorizará las actividades con retorno social y cultural para los vecinos
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El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido pisar el freno en la agenda de eventos multitudinarios que se celebran en los espacios más emblemáticos de Ciutat Vella.
El distrito ha acordado este viernes una actualización de los criterios para autorizar actividades en la vía pública, con el objetivo de reducir la presión sobre plazas y paseos históricos como la plaza de Sant Jaume, la avenida de la Catedral o el paseo de Lluís Companys.
En este último, el consistorio quiere limitar a un máximo de 25 eventos anuales, frente a los 67 de 2024 o los 61 de 2023.
El nuevo marco normativo, que emana del Pacto por Ciutat Vella y de su proceso participativo, busca combatir la saturación del espacio público y priorizar aquellas actividades con retorno directo para la ciudadanía, como actos culturales, sociales o de promoción económica impulsados desde el propio distrito.
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Casi 2.000 ocupaciones al año y 800.000 euros en infraestructuras
Durante el año pasado, en Ciutat Vella se gestionaron 1.994 ocupaciones del espacio público, una media de 5,4 al día.
De ellas, 413 correspondieron a actos de centralidad, 737 a actividades de barrio y 844 a paradas individuales para ferias y muestras callejeras. Solo en infraestructuras para estos actos, el Ayuntamiento invirtió cerca de 800.000 euros.
El paseo de Lluis Companys en una imagen de archivo / AJUNTAMENT DE BARCELONA
El nuevo criterio jerárquico que regirá la autorización de eventos pondrá el foco en el interés público. Tendrán preferencia aquellas propuestas que fomenten la educación, la cultura, el deporte, la salud, el medio ambiente, la vivienda y la movilidad sostenible o la descarbonización, entre otros ejes estratégicos.
Recuperar el equilibrio
La iniciativa nace de una preocupación reiterada en los foros ciudadanos celebrados en el marco del Pacto por Ciutat Vella, donde se ha evidenciado una percepción de saturación en puntos neurálgicos del distrito.
Según fuentes municipales, el nuevo enfoque quiere devolver el equilibrio a un entorno históricamente tensionado por la concentración de actos, al tiempo que se refuerza la vida vecinal y se descentraliza la oferta de actividades.
