La plantilla de Bon Preu anuncia nuevas protestas: "Es el peor supermercado para trabajar"

Los trabajadores de Bon Preu vuelven a hacer ruido. Una parte de la plantilla, perteneciente al sindicato CGT, denuncia que viven una situación que ha ido "a peor" desde que la empresa llegó a un acuerdo con CCOO --del que UGT se descolgó--. Mabel, extrabajadora en la cadena de Joan Font con más de 15 años de experiencia, asegura a Metrópoli que es "el peor supermercado para trabajar". Es por ello que los empleados prometen movilizaciones en los próximos meses frente a las puertas de los supermercados. Desde Bon Preu, por su parte, explican que "no tienen constancia de malestar laboral ni sindical" y consideran que el clima de trabajo ha ido "a mejor". 

El convenio pactado, que llegó tras múltiples protestas organizadas por CGT, contemplaba un incremento salarial del 10,5%. En concreto, el texto estipulaba que en 2022 el incremento sería del 4% --con efectos retroactivos--, de 2,5% en 2023, del 2% en 2024 y del 2% en 2025.

Gran parte de los empleados consideran que es "insuficiente" y exigen una subida del salario en base al incremento real del IPC. No obstante, las demandas de los empleados van mucho más allá de la reivindicación económica: denuncian despidos irregulares, acoso laboral e incumplimiento del Código Laboral y de la Seguridad Social. 

PROTESTAS POR LA CONCILIACIÓN LABORAL 

Uno de los grandes reclamos de los empleados de Bon Preu es la puesta en marcha de un verdadero plan de conciliación laboral. Según explica la empresa a este medio, el plan ya se ha iniciado y "se ha aplicado desde el minuto 0 el decreto del Gobierno sobre permisos laborales". No obstante, los trabajadores consideran que el proyecto de conciliación todavía no está claro y cuenta con muchos puntos "que perjudican a los empleados".

En el comunicado de la empresa a sus trabajadores sobre la conciliación laboral, al que ha tenido acceso Metrópoli, el consejero delegado de Bon Preu, Joan Font, asegura que es un proyecto que "cada vez tiene más fuerza" y que ha sido "muy trabajado y debatido" para lograr dar respuesta tanto a los clientes como a los trabajadores. "En Bon Preu es importante que las personas se vinculen con el proyecto empresarial a largo plazo y quieran crecer con nosotros", escribe el empresario --que forma parte de la lista Forbes de millonarios del mundo--. No obstante, para los trabajadores, las acciones de la empresa "alejan" a los empleados y no ofrecen garantías para seguir en la cadena de supermercados.

Mabel afirma, en coincidencia con otros empleados, que las protestas de varios empleados por las condiciones laborales han terminado en despido. "Han echado a la calle a gente con años de recorrido en la empresa y ahora hablan de una vinculación a largo plazo con el proyecto", denuncia Juan (nombre ficticio), también extrabajador. 

MOVILIZACIONES

Desde CGT aseguran a este digital que están preparando movilizaciones para los próximos meses con el fin de denunciar el proyecto de conciliación y exigir, como ya hicieron el año pasado, un incremento salarial que "aplique el IPC real y un convenio justo". Las primeras protestas se prevén en Tarragona, donde se llevarán a cabo entre agosto y mediados de septiembre. Después, se planea por pasar por Mataró y otras localidades para finalmente culminar en Barcelona antes de Navidad, al igual que sucedió en 2023. 

Javier La Rosa Delgado, trabajador en Bon Preu desde hace 15 años, denuncia que la empresa está intentado hacer un lavado de cara y, en realidad, se están cometiendo "numerosas irregularidades". El empleado insiste en el principal contrapunto del nuevo acuerdo de conciliación: "Están rebajando las horas del turno de noche a 35 horas con una bajada muy importante del salario", denuncia. Según relata, las horas se reparten de tal manera que no superen las seis horas diarias y, de este modo, no se asigne el descanso correspondiente. 

Concentración de Bon Preu en una imagen de archivo / MA

"BUEN CLIMA LABORAL"

En conversación con este digital, fuentes de la empresa aseguran desconocer este clima de mal ambiente laboral. "Actualmente hemos hecho una campaña de paz total y buen clima laboral", explican. Además, hacen referencia a las últimas medidas implementadas: una subida salarial del 6%, un descuento del 8% en todas las compras realizadas en el supermercado por los trabajadores y un aumento de los permisos remunerados.

No obstante, varios empleados denuncian a este medio que los permisos remunerados se están compensando con una "bolsa de horas" que hace que el valor percibido sea menor. En esta línea, denuncian que, con motivo de la bolsa de horas, ningún festivo se cobra al precio real estipulado. "Todos partimos de una bolsa de 67 horas anuales que hemos de realizar, por lo que siempre estamos en deuda con la empresa", denuncian. 

OLEADA DE DESPIDOS 

En contraposición al "buen clima laboral" que aseguran desde Bon Preu, los trabajadores que se han puesto en contacto con Metrópoli aseguran que está habiendo una "oleada de despidos improcedentes". Es el caso de Mabel, que, por "agotamiento" aceptó un trato con la empresa tras el despido para no tener que enfrentarse al trámite que supone iniciar un proceso judicial.

Según aseguran varios de los afectados, los despidos se compensan con contratos laborales de menos de 30 horas. "Queda claro que a Bonpreu le interesa más", denuncia Javier. En esta línea, varios afectados como la delegada sindical de CGT en Bon Preu Teresa Segués, aseguran que muchos de los despidos se dan por una "persecución sindical" en la empresa. Coincide con ella Carles León, Secretario General de la Sección Sindical de la Intersindical -CSC y miembro del Comitè de Empresa en Serveis Centrals, que asegura que se han despedido a trabajadores con años de experiencia y alto rendimiento sin razones de peso. 

Protesta a las puertas del Bon Preu en una imagen de archivo / TWITTER

PERSECUCIÓN SINDICAL 

"UGT y CCOO --sindicatos mayoritarios-- tienen un acuerdo con Bon Preu por lo que no les interesa intervenir en estas irregularidades", asegura Javier. Segués, por su parte, asegura que recibió una denuncia falsa por acoso laboral "por intereses de la empresa". "Se inició el proceso judicial y se determinó que era todo mentira", explica la afectada. Por ello y por más motivos, Teresa ha presentado junto a otros delegados sindicales una denuncia conjunta por persecución sindical.

El pasado diciembre, ex trabajadores de Bon Preu - Esclat, junto con el responsable de la Intersindical - CSC, denunciaron en el Parlament de Catalunya una persecución sindical por parte de la empresa dirigida por Joan Font. Marc Faustino, responsable de acción sindical del sindicato, denunció ante los medios de comunicación la que considera una "práctica ilegal de la empresa" por despedir a dos trabajadores justo después de que anunciaran la formación de una sección sindical. 

PROBLEMAS CON LA LENGUA 

Otra de las problemáticas que denuncian los trabajadores es la persecución por el uso del catalán. En el Bonpreu en el que trabajaba Mabel, ubicado en una zona costera, hubo muchos problemas derivados del uso del catalán. Según cuenta la extrabajadora, estaban sometidos a un control "extremo" para obligarles a hablar en catalán en todo momento, incluso en los ratos de tiempo libre. En documentos que se repartían a los empleados, a los que ha tenido acceso Metrópoli, se observa como se amenazaba a los trabajadores con sanciones en caso de no cumplir con la norma. 

De hecho, en su comercio se implementó un "juego" en el que los trabajadores obtenían "caritas verdes --felices-- o rojas --enfadadas--" en función del uso que hacían del catalán. Según Mabel, varios empleados protestaron ante esta situación pero las consecuencias eran "peores". "Si te quejabas, pagabas las consecuencias con más trabajo o con una reasignación de zona que no te gustase", asegura. 

Uno de los mensajes dirigidos a los trabajadores en Bon Preu sobre el catalán / CEDIDA