Ni bikini ni fuet: el bocadillo que arrasa en Barcelona entre los más gourmets tiene este original sabor

Los clásicos bocadillos han dado paso a una nueva tendencia culinaria que está conquistando a los paladares más exigentes de Barcelona. Lejos de los tradicionales bikinis o bocadillos de fuet, un nuevo protagonista ha emergido en la escena: el bocadillo planchado con pan de coca. Esta delicia, que combina ingredientes de alta calidad con una presentación innovadora, se ha convertido en un imprescindible para los amantes de la buena comida que buscan algo diferente, económico y delicioso.

Uno de los lugares más representativos de esta tendencia es la famosa Granja Elena, un pequeño bar-restaurante ubicado en la zona de Sants. Este establecimiento, con más de 40 años de historia, ha sabido adaptarse a los tiempos y hoy en día se erige como un templo para los amantes de los bocadillos gourmet. Aquí, los bocadillos no solo se preparan con esmero, sino que se elevan a un nivel superior gracias a su cuidada elaboración y originalidad.

Bocadillos planchados con pan de coca

La clave del éxito de estos bocadillos radica en el uso del pan de coca, un pan típico de Catalunya que se caracteriza por su textura ligera y crujiente. En la Granja Elena, estos bocadillos se tuestan cuidadosamente en una sartén con mantequilla, lo que les otorga un exterior dorado y crujiente, mientras que el interior se mantiene jugoso y lleno de sabor. Además, si el bocadillo incluye algún tipo de guiso, como en el caso de la coca aguja de vaca estofada, el proceso continúa con un breve paso por el microondas para asegurar que todos los ingredientes estén perfectamente calientes y fusionados.

Un bocadillo tostado de pan de coca de la Granja Elena ÓSCAR GÓMEZ

En la carta de la Granja Elena destacan varias creaciones que se han convertido en las favoritas del público. Uno de los más populares es la coca de aguja de vaca estofada con teriyaki y cheddar, una combinación que mezcla la intensidad de la carne estofada con el dulzor del teriyaki y el toque cremoso del queso cheddar. Otro bocadillo que no pasa desapercibido es el de chicharrón de Cádiz con queso y tomate, una propuesta que combina el sabor potente del chicharrón con la frescura del tomate y la suavidad del queso, logrando un equilibrio perfecto. Para aquellos que prefieren algo más clásico, el bocadillo de serrano, brie y berenjena es una opción que nunca decepciona, con la combinación del jamón serrano salado, el queso brie cremoso y la berenjena asada aportando un toque de sofisticación.

Precios muy asequibles

Lo que hace aún más atractivo a este bocadillo planchado es su precio. En una ciudad donde la gastronomía gourmet a menudo está asociada a precios elevados, los bocadillos de la Granja Elena ofrecen una opción asequible sin renunciar a la calidad. Con precios que oscilan entre los cuatro y cinco euros, estos bocadillos permiten disfrutar de una experiencia culinaria de alto nivel sin romper el bolsillo.

El bocadillo planchado con pan de coca ha llegado para quedarse. Su combinación de ingredientes de calidad, preparación meticulosa y precio accesible lo convierte en una opción irresistible para los foodies de Barcelona. Si visitas la ciudad y quieres probar algo realmente especial, no dudes en acercarte a la Granja Elena y descubrir por ti mismo por qué estos bocadillos están causando sensación.