Panorámica de Barcelona durante un episodio de contaminación

Panorámica de Barcelona durante un episodio de contaminación CLARA FERNÁNDEZ

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La calidad del aire en Barcelona mejora: menos NO₂ y menos muertes por contaminación

El primer semestre de 2025 confirma la mejora en la calidad del aire y sus efectos positivos en la salud pública

Así es el sistema que anticipa la calidad del aire en cada calle de Barcelona

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Barcelona ha registrado en el primer semestre de 2025 niveles históricos de calidad del aire, con una reducción generalizada del dióxido de nitrógeno (NO₂) en todas las estaciones de la ciudad.

Así lo recoge el último informe de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), presentado este lunes por la teniente de alcaldía de Acción Climática, Laia Bonet, y la concejal de Salud, Marta Villanueva.

Archivo - Tráfico de entrada a la ciudad de Barcelona por la Avenida de Meridiana, desde el Puente de Sarajevo.

Archivo - Tráfico de entrada a la ciudad de Barcelona por la Avenida de Meridiana, desde el Puente de Sarajevo. David Zorrakino - Europa Press

Según los datos, la contaminación por NO₂ —un contaminante estrechamente ligado al tráfico rodado— ha descendido entre un 2% y un 14% respecto al mismo periodo de 2024, consolidando una tendencia a la baja sostenida en los últimos años.

Barcelona cumple con los límites legales europeos y mantiene la mejor calidad del aire de su historia”, ha subrayado Bonet, que ha destacado la mejora especialmente significativa en la estación de tráfico del Eixample, donde se ha pasado de 42 microgramos en 2022 a solo 30 en 2025.

La reducción del NO₂ mejora la salud pública

Además del descenso de contaminantes, el informe de la ASPB muestra una mejora clara en indicadores de salud vinculados a la contaminación del aire.

Entre 2020 y 2024, la mortalidad atribuible a la polución ha caído un 32%, lo que se traduce en 600 muertes evitables.

También han disminuido los nuevos diagnósticos de asma infantil en un 36% y los casos de cáncer de pulmón atribuibles a la contaminación en 50 personas menos.

Panorámica de Barcelona durante un episodio de contaminación

Panorámica de Barcelona durante un episodio de contaminación EFE

Respirar aire limpio es una cuestión de salud pública”, ha remarcado Villanueva, quien ha defendido que estas mejoras son resultado directo de políticas medioambientales sostenidas y una apuesta firme por la descarbonización de la ciudad.

La ciudad sigue por encima de los valores recomendados por la OMS

Pese a los avances, los niveles de NO₂ y partículas PM10 y PM2,5 —las principales responsables de enfermedades respiratorias y cardiovasculares— siguen por encima de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de los futuros límites legales marcados para 2030.

Las partículas PM se han mantenido estables desde 2013, pero aún representan un riesgo para la población vulnerable.

El impacto sanitario a largo plazo entre 2020 y 2024 todavía refleja que el 8% de las muertes por causas naturales en la ciudad son atribuibles a la contaminación del aire (frente al 13% en 2018-2019), así como el 36% de los nuevos casos de asma infantil (antes un 51%) y el 12% de los casos anuales de cáncer de pulmón (frente al 17%).

Políticas climáticas que dan resultados

Bonet ha insistido en que estas mejoras “no caen del cielo”, sino que son fruto de medidas como la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), la electrificación progresiva de la flota de autobuses, la ampliación del Bicing y una red creciente de carriles bici, a la que el consistorio sumará 12 kilómetros adicionales en los próximos meses.

Indicador de la Zona de Bajas Emisiones

Indicador de la Zona de Bajas Emisiones EFE

Además, ha recordado que Barcelona cuenta con un ambicioso Pla Clima 2030, dotado con 1.800 millones de euros, para adaptar la ciudad a los efectos del cambio climático y reducir las emisiones contaminantes.

También ayuda la meteorología

A pesar de que la meteorología ha contribuido —con lluvias que han limpiado la atmósfera en un contexto de años de sequía—, la tendencia positiva se mantiene desde antes del inicio del 2025.

Un trimestre con lluvia ayuda, pero los datos ya eran positivos antes”, ha apuntado Bonet.