FOTOS | El origen de la Fira de Santa Llúcia, uno de los mercados con más historia de Barcelona

Desde 1786 se organiza uno de los mercados más tradicionales de Barcelona, la Fira de Santa Llúcia. Todos los años, más de doscientos puestos llenan la avenida de la Catedral de Barcelona con una amplia variedad de productos. La feria se instala a finales de noviembre y se mantiene durante los días de Navidad. Aunque se trata de unos de los mercados más populares de la cuidad, puede que pocos sepan su historia.

Imagen de una celebración religiosa por Santa Llúcia / ARCHIVO FOTOGRÁFICO SANTA LLÚCIA

ORIGEN DEL NOMBRE

Como bien dice su nombre, la Fira de Santa Llúcia hace referencia a Santa Llúcia, patrona de las modistas e invidentes, cuyo día se celebra el 13 de diciembre. Hace décadas, la ubicación de este mercado era la capilla románica de las Onze Mil Verges, en la Catedral. Allí se adoraba a Santa Quitèria, Santa Àgata y Santa Llúcia. Con el paso de los años, el nombre de la capilla se ha simplificado y, actualmente, recibe el nombre de Santa Llúcia. 

Modistas celebrando el día de su patrona, Santa Llúcia, en 1944 / TWITTER HISTÒRIES DE BARCELONA

A principios del siglo XX, el día 13 de diciembre, la gente de la ciudad acudía a la Catedral a la capilla de Santa Llúcia para rogarle que les conservase la vista. Los feriantes sacaban sus mejores productos aprovechando la gran afluencia de gente. Desde entonces se adoptó la costumbre de abrir la Fira de Santa Llúcia el día 13 de diciembre, pero al igual que ocurre con las luces de Navidad, con el paso de los años se inaugura antes.

Imagen de la Fira de Santa Llúcia / ARCHIVO FOTOGRÁFICO FIRA SANTA LLÚCIA

CELEBRACIONES

En algunas poblaciones de Catalunya, las niñas que en el siglo XIX y parte del XX estudiaban costura, hacían fiesta y corrían por la ciudad entonando canciones y salmos. La gente las apodaba llucietes. En otros lugares, se conoce que las chicas se reunían a escuchar misa y luego iban en grupo por las casas recogiendo limosnas y donativos. Una de ellas representaba Santa Llúcia y llevaba puesta una corona de flores. En Barcelona, las modistas se reunían en el Parc de la Ciutadella, donde se celebraba una gran fiesta.

Imagen de un niño encima de un burro durante la Fira de Santa Llúcia / ARCHIVO FOTOGRÁFICO FIRA SANTA LLÚCIA

MOMENTOS CRÍTICOS DE LA FIRA

En sus 237 años de historia hubo ocasiones en que la fira se tuvo que suspender. La primera de ellas, durante la ocupación napoleónica --entre 1808 y 1813. También debido a la Guerra Civil --entre 1936 y 1939--, cuando las propias familias destruyeron cualquier elemento sospechoso de ser religioso, como eran las figuras del pesebre que se vendían en la fira. Unas décadas más tarde, en 1979, se produjo un incendio que afectó varias paradas y las autoridades estuvieron a punto de suspenderla. 

Otras ferias de Navidad muy populares en Barcelona son la Fira de la Sagrada Familia o la Fira de Reis en la Gran Via, aunque, sin duda, la Fira de Santa Llúcia es una de las más conocidas y con más historia de la ciudad de Barcelona.